SELECCIONANDO EL COLOR

CUARTA PARTE

Así como el comportamiento cromático de cada diente es diferente, existen detalles en el tejido dental que al ser bien interpretados y transmitidos a la restauración hará que su naturalidad sea aún mayor.

Una vez seleccionados los tonos correspondientes y la manera en la que se distribuyen en el diente, se debe fijar la atención en otras características diferentes al color para complementar el trabajo restaurativo.

Factores a tener en cuenta

Identificar la edad cronológica y biológica del diente en algunos casos puede ser un punto de partida y una ayuda para el proceso de personalización en la restauración. El tejido dental con el pasar del tiempo, con el tipo de función que haya tenido, el tipo de oclusión y el historial de procedimientos recibidos puede sufrir modificaciones anatómicas, cromáticas e histológicas confiriéndole características únicas y exclusivas.

En caso de realizar la restauración teniendo como testigo y modelo algún diente adyacente o cercano debe tenerse en cuenta detalles como la presencia o no de facetas de desgaste ya sean fisiológicas o patológicas, posibles zonas de abfracción, erosión o abrasión, presencia de pigmentos intrínsecos o extrínsecos, defectos en la superficie del esmalte, manchas hipoplásicas, presencia de mamelones dentales, periquematíes o inclusive líneas de fractura.

Esto hará que la triada estética de forma, textura y color pueda complementarse para así lograr restauraciones estéticamente agradables a la vista.

Dr. Juan Manuel Ramírez

Odontólogo Universidad Javeriana
Rehabilitador Oral CIEO

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