El término CAD-CAM, aplicado al mundo odontológico, constituye una tecnología que nos permite realizar una restauración dental mediante el apoyo informático del diseño y un sistema de mecanizado o fresado automatizado que trabaja a sus órdenes. El CAD-CAM es el futuro ya presente de las prótesis dentales, así como de otros campos de la Odontología como el diagnóstico o la cirugía implantológica, mediante el empleo de un software de planificación y la creación de férulas quirúrgicas que optimizan y disminuyen la agresividad de nuestras intervenciones, haciéndolas mínimamente invasivas.
El desarrollo de técnicas controladas por ordenador para la odontología restauradora, tiene el objetivo de mejorar la calidad de los materiales y al mismo tiempo disminuir los costos de producción, al simplificar el método y reducir el tiempo empleado. No obstante, el uso de la tecnología informática sólo es justificable con la condición de que se puedan mejorar o, como mínimo, alcanzar las características reconocidas de calidad clínica y de materiales de las reconstrucciones odontológicas tradicionales.
Los sistemas CAD-CAM ofrecen múltiples ventajas en lo que respecta a su aplicación dental. Permiten elaborar restauraciones dentales con materiales de primera calidad y alta tecnología, mediante el empleo de materiales homogéneos, que no son alterados durante la preparación; el proceso automatizado supone un ahorro de tiempo, lo cual, en algunas técnicas, puede evitar tener que preparar provisionales, y acortar o reducir a una sola el número de visitas; también puede suponer un ahorro de costos, así como permite técnicas mínimamente invasivas, pudiendo, en algunos casos, evitar la toma de impresiones. Los ordenadores se hacen cargo de diferentes fases de trabajo rutinarias que precisan mucho tiempo durante la fabricación de incrustaciones, coronas y puentes; asimismo se evitan las variaciones dimensionales que pueden tener lugar durante la obtención de modelos, modelado en cera y proceso de colado. La supresión de algunas fases de las técnicas de laboratorio convencionales nos permite ganar tiempo, lo cual supone ahorrar costos. Estos sistemas CAD-CAM permiten obtener restauraciones de alta precisión, calidad y tecnología, con una correcta oclusión que no requieren excesivas correcciones en boca.
No obstante, entre los inconvenientes de la tecnología computarizada en Odontología, podríamos destacar los altos costos iniciales (gran inversión requerida para su adquisición, bien por parte del clínico o del laboratorio), la necesidad de un adecuado entrenamiento y aprendizaje por parte del profesional y/o del técnico para manejar el sistema y estar familiarizado con los aspectos clínicos y de laboratorio: la impresión óptica o el escaneado de los modelos, según el sistema concreto al que nos refiramos, la computadora, el software, el material, herramientas y maquinaria. Además el “CAD” no registra lo que no ve, precisa de preparaciones nítidas.
Todo ello hace que hoy por hoy no sea posible la resolución de todos los casos que se presentan en la clínica diaria mediante estos procesos, pues económicamente suponen una serie de costos superiores a los de las técnicas convencionales todavía no asumibles por parte de todos los pacientes.